Buscar este blog

miércoles, 13 de diciembre de 2017

AFTER

Molestias del viento contra los ojos, vaya ojos los de usted que no ven pese a tanto mirar. Molestia de pestañas, molestia de párpados con la mota de polvo que sobrevuela toda la costa blanca, acabada sin más en el unguis que usted frota y frota con la yema del dedo, tenga cuidado, hombre, que se va a quedar con el lacrimal en la mano y luego no podrá llorar, ya, ya sé, no siga, usted  no llora,  usted no lagrimea, usted no se aflige aunque la mota voladora escueza y moleste, sobre todo a estas horas, con la córnea roja, la pupila derretida, el cristalino opaco, el nervio óptico seccionado.....


No hay comentarios:

Publicar un comentario