Buscar este blog

viernes, 19 de enero de 2018

BARRIO

En las tardes rojas, una nube tubular se apodera del horizonte presagiando viento para mañana. Las paredes de la plaza están llenas de espray, pintadas sucias que se mezclan con el orín de los perros. Boquillas de porros, bolsas rotas de pipas, papeleras esquilmadas y bancos sin asiento. Pasa igual en todos los barrios. Un grupo de colegas trapichea hachís, pirulas y farlopa sin el  mínimo temor. Casi todos andan del desempleo a los calabozos y de los calabozos al talego y del talego al desempleo. Un círculo apenas irrompible.
 Los bares huelen a cantueso, a coñac, café y anís del mono. Máquinas tragaperras, esputos . Los bares florecen de miércoles a viernes. Tiemblan por las mañanas entre legañas, uñas de yeso y voces roncas. Al atardecer rellenan el hueco de lo cotidiano con espuma de cervezas y tapas de mayonesa  turbia.
La farola de la esquina no funciona porque anda sin tripas, cables ajenos al mantenimiento municipal. Apenas aparece político alguno durante años, salvo atropello manifiesto o reunión  publicitada de vecinos atropellados. Reuniones con promesas y promesas que se funden con lo ya hecho en el centro neurálgico de cada zona: más policía que proteja al todo de la nada, y más nada que confunda al todo.   
   Esa nube tubular no se apodera solo del horizonte, avanza a ras de asfalto como una metomentodo entre los camellos que pululan buscándose la vida en la sucia replaceta.
Un quinceañero con tatuajes verdes y colorados escupe al suelo mientras limpia la bujía de su moto trucada. La vida bulle, hierve como una acelga verde en una gran olla de agua. Cada momento cada cual persevera en cada quién y se anda a la espera del sueldo del paro, día diez.  
Mañana el viento de la tarde roja seguirá filtrándose entre las cestas de la compra, entre las motos de escape libre y los trapicheos de los desocupados. Penetrará en el corazón de las casas, en la ginebra y las copas vespertinas, irrumpirá como un ciclón en tertulias escatológicas y pasaderas que sólo rebosan vida,... vida de barrio.


MEDITACIONES EN LA MADRUGADA


El Iohexol y la Iopromida se deshacen vía renal. Ahí están, en la taza del váter, líquidos opacos a la radiación que sobrevivirá al fin de mi mundo. Hace nada, un instante antes de la madrugada, Venus brillaba iluminando a la luna oval y la luna oval brillaba iluminando a Venus, ofreciendo un espectáculo único. La soledad en las calles tiene un punto de estremecimiento inquietante. Sé que los asesinos siempre están emboscados en las alcantarillas, pese a esta circunstancia, pasear en absoluto silencio me hace fuerte. 

Pensamientos, que difícil sostenerlos sin divagar o sentirse herido, dudar, temblar ante la duda, desobedecerse a uno mismo.... Las jacarandas tapan aceras con inflorescencias racimosas de flores color violáceo, uno no sabe a quién se le ocurrió plantar arboledas típicas de la América intertropical y subtropical en esta parte del mediterráneo.......... cucarachas invasoras, grillos, escarabajos en fase larvaria, mosquitos revoloteando sobre folíolos pinnatisectos.

 A veces imagino que la finca entera, el edificio, está sostenido por los nidos barrosos de  golondrinas, pinzados en el aire de las terrazas, a su vez sostenidas por tendederos de sábanas, por pinzas de madera, por el cielo azul que bosteza apartando de un manotazo una nube suave con forma de anillo.
He paseado al amanecer, sí, he andado solo y cabizbajo, acaso emulando a la muerte de todos los días, recordando las duras jornadas pasadas, las ausencias, el porqué de esta situación. Interrogaciones e interregnos. Que complicada llega a ser mi estructura mental. ¿Cuánto puede aguantar un ser humano sin dormir?...

En "La invasión de los ladrones de cuerpos"...esporas provenientes del espacio dan origen a vainas, fabricando copias idénticas de seres humanos. La intención de estos extraterrestres es reemplazar a toda la raza humana por réplicas carentes de cualquier tipo de sentimiento. ¿El vehículo de sometimiento?... el sueño... soy una especie de doctor Miles Bennell aguantando toda la carga neurológica que supone la guerra fría... el miedo de Hollywood al macartismo, el último mohicano rondando las avenidas pobladas de seres anónimos y cariacontecidos.......

Dudas, coño, motivo de mi penosa existencia. Una vez más pasan ya cuarenta y ocho horas sin sueño ni reparación posible.. Dolido, dolorido, pienso en el origen del daño ...."podemos imaginarlo todo, predecirlo todo, salvo hasta dónde podemos hundirnos".



CORAZONES

Coleccionaba corazones, que fácil y práctico, en poquito  acariciaba y a la mínima ya apoyaba su oreja en el pecho. Palabras mojadas, (brotaban gotitas pequeñas de saliva mojando el cuello). Suspiraba, ufff, que suspiros sostenidos, ensayados, tórridos.
Luego, con la uña del dedo rascaba poco a poco, abría  una grieta, lamía la sangre, hurgaba entre las costillas la caja torácica y, pinchándolo como un gusano enroscado en su anzuelo doble, extraía el corazón. 
Coleccionaba corazones, que fácil y práctico, el mío, tan tonto,  también.



LA MONTAÑA RUSA DE LA MUERTE

Me parece muy interesante la idea de Julijonas Urbonas y su montaña rusa de la muerte ( Euthanasia Coaster): un paseo de 3 minutos que de forma inicial te lleva por una larga pendiente de poco más de 500 metros para dejarte caer de forma masiva, realizando 7 giros estratégicamente distribuidos, todo en un minuto. Los 10 Gs de fuerza gravitacional, aparte de subir la adrenalina, te matarán por hipoxia.
Con certeza este diseñador lituano se ha ganado simpatías. Al parecer anda promoviendo el asunto de la atracción letal por foros relacionados con la muerte digna, digna y divertida, imagino.
 Coinciden mis lecturas con el cachivache de la muerte, pues ando enfrascado en un librito menudo, pequeño, peludo, suave, titulado "La tienda de los suicidas", Jean Teulé. Es un divertimento ácido donde la familia Tuvache, dedicada a la venta de productos para el suicidio, díganse horcas, modelos de sogas, venenos, armas y etcéteras, está preocupadísima porque su tercer hijo les ha salido vitalista, alegre y de risa fácil. 
Coincidencias negras: Urbonas podría trabajar perfectamente en la tienda de los Tuvache y yo, debería de corregir mis preferencias informativas.


NOVELA NEGRA, MON AMOUR

Cuando fumaba tabaco, puros de la habana o santo domingo, hojas frescas olorosas de Egipto egipciano, era otra persona. Amaba la última gota de un vaso ancho con medio cubito de hielo ahogado evaporándose en la barra de madera de cualquier club cotton, club de gánsteres con diente de oro y uña meñique larga y raya de cocaína caída en la solapa de una chaqueta azul celeste fosforito.
 Inhalaba ásperamente con la eficacia de una traqueotomía efectuada por la boquilla alquitranosa de un pitillo rubio. Olores a putas y perfume noctívago de jazz estridente, contrabajo desafinado, fusión recién inventada, niebla turbia volátil envolviendo mis codos apoyados en lecturas. Las lecturas primarias de Chandler, Cain, Le Carrè, de Simenón con su pipa de espuma de océano cantábrico, lata de anchoas con mechero de yesca.
 Bailaban algunas mujeres mostrando su pitillera charol, tacones altos y ligueros morados, apretando el talle exacto de haschís limpio. Líbanes, afgano, narguilées de menta con agua, crímenes sin resolver, detectives con cara picada de viruela....
 Cuando fumaba tabaco latía certero uno de mis dos corazones de aire impuro, y me ahogaba en los sueños de las novelas negras, Hammet y Blake, Himes o Chase......